BAND ON THE RUN / PAUL McCARTNEY & WINGS
Ir a la discografía como solista de Paul McCartney es realmente una aventura, donde encuentras obras maestras, éxitos radiales y también fracasos. Es que tener como sombra a The Beatles era un saco muy pesado sobre su espalda, y en cada trabajo musical la crítica lo miraba, lamentablemente, bajo esa lupa, sin entender que Paul no se quería quedar pegado en los "yeah, yeah" sesenteros.
Por ese entonces, a inicios del año 1973, Paul y sus Wings disfrutaban el éxito comercial del disco Red Rose Speedway. Además, ese mismo año compuso el tema principal para la cinta James Bond 007, "Live and let Die". Tanto la canción (con producción de George Martin) como la película, protagonizada por Roger Moore, fueron un éxito a nivel planetario, y esto nuevamente puso a Paul en la cima de los charts y obviamente con ganas de seguir superándose cada vez mas.
En ese entonces los Wings eran Denny Laine en bajo, Henry McCullough en guitarra, Denny Seiwell a la batería, Linda McCartney en coros y teclados y obviamente Paul, que iba de vocalista, pianista y guitarrista y además ponía su pequeña granja en Escocia para ensayar.
Fue en esos ensayos donde Macca le comunicó a sus músicos que era hora de innovar, de ir por nuevos sonidos y además armar las maletas, porque estaba algo aburrido de la rutina del Reino Unido. Como era de esperar esta decisión tomó por sorpresa a los integrantes, quienes también quedaron algo molestos. Pero Paul era el jefe.
Resulta que en ese periodo de buena cosecha musical para Paul, los demás integrantes empezaron a pedir aumentos en sus sueldos, porque la banda estaba generando ganancias con los singles, los conciertos y las invitaciones a programas de Televisión y en sus cuentas corrientes seguían recibiendo la misma cantidad de libras de cuando el proyecto aún estaba en pañales.
Mientras McCullough y Seiwell iban de oficina en oficina en el edificio de la EMI, buscando alguna forma de que les subieran sus sueldos, Paul ya tenía listo el destino para ir a grabar el siguiente álbum de la banda. El destino elegido era Nigeria, donde la EMI tenía un estudio de grabación y donde además pensaba que la pasarían de lujo entre ensayos y playa. Pero lo que McCartney no sabía era que Nigeria pasaba por una dictadura militar, donde la corrupción era un deporte olímpico y para mas remate pasaban por un brote de cólera. A todo eso súmenle, que cuando la familia McCartney tenía los pasajes listos para ir a los estudios de la EMI en Lagos, McCullough y Seiwell decidieron abandonar el proyecto ya que nunca contaron con el apoyo del ex-Beatle en el tema de sus salarios. Mas bien, Paul se hacía el tonto y tras conocer la decisión de sus colegas simplemente se encogió de hombros, respiro profundamente y le dijo a Laine que se encargue de las guitarras porque del bajo y la batería sería Paul el encargado. Asi que llamaron al ingeniero de grabación, Geoff Emerick, con quien ya había trabajado en los discos de los fab four y tomaron rumbo al pais africano.
En resumen, la estadía en Lagos fue una aventura muy particular para los McCartney y compañía. Primero, el estudio de grabación era precario en cuanto a implementos, y si se rascaban la espalda en la pared lo mas probable es que se fuera al suelo. Segundo, tuvieron que pasar mas de un susto, partiendo por extraños y ruidosos insectos que no los dejaban dormir, el asalto que sufrieron Paul y Linda en manos de un grupo de "malulos" que con cuchillo en mano le quitaron joyas, relojes y las cintas que contenían los demos de las canciones del disco, el infarto al miocardio que sufrió Macca a causa de que fumaba como si estuviera preso y la sorpresiva visita poco amigable de un grupo de músicos locales al estudio de grabación que iban con la misión de lincharlos y molerlos a palos por querer robar y a la vez lucrar con sus sonidos nativos. Finalmente Paul los puso en calma y les puso las cintas, para que comprobaran que no había ningún detalle de musica típica nigeriana en sus tracks.
Finalmente, un 7 de Diciembre de 1973, salía a la venta el LP "Band on the Run", que llegaría a la cima del Billboard y quedaría como uno de sus trabajos mas importantes en la carrera solista de este gran músico.
Así que acomodate bien, para las antenas, busca tu vinilo, tu cassette, tu CD o el Spotify y vamos por ese analisis canción por canción. Acompañeme!!!
El disco empieza con la canción que bautiza este LP, y usa ese viejo truco "collage" que usó Paul en el "Sgt. Peppers..." y en especial el "Abbey Road", que es juntar pedazos de canciones y armar un nuevo track como si fuera una torta de fresa (?). En "Band on the Run", Macca mezcla tres canciones, que vendrían siendo algo así como actos. En el primero, escuchamos una suave y dulce melodía con un Paul contándonos los humillado que se siente en esa celda, y el deseo de volver a ver a su gente y a su pueblo. Pero de la nada aparece una parte mas rockera, con un juego bajo-guitarra-batería digno del hard rock. Este sería el segundo acto, donde nos habla del plan de escape de esa cárcel. El tercer acto parte con una guitarra electroacústica con aroma a folk, y donde el cantante nos cuenta sobre su escape junto a su banda de malhechores. Esta canción llegó al primer puesto del Billboard, y debe sí o sí formar parte de cualquier playlist de música de los setentas.
Un intro de guitarras y saxofón nos anuncia que empieza "Jet", una típica obra McCarniana donde le da rienda suelta a su talento de crear canciones dignas del Pop. Inspirada en las travesuras de su perro, esta pieza llegó a entrar en el Top 10 del Billboard y además sirvió para que una banda australiana llevara Jet como nombre.
En la etapa final de The Beatles, Lennon acusaba que Paul componía "canciones para abuelas". Es que quizás John sentía uno que otro celo por la manera en que su compañero sacaba melodías al piano, y que al parecer se le hacía una tarea fácil y además llegaban a ser cara A de los singles de la banda y para mas remate, eran un éxito en las listas. Una de estas canciones que quizás le trajo a la mesa ese recuerdo a John, es "Bluebird". Una dulce y frágil balada acústica, cuya letra fue escrita en gran parte en el año 1970, cuando Paul y Linda estuvieron de vacaciones en Jamaica. En ella se usa el vuelo de un pájaro como metáfora del fuerte poder del amor, ese amor que traspasa el poder de la mente del ser humano y pide que ojalá contagiara a todo el mundo. Por si acaso, los juegos de voces en el coro son marca de la casa.
La siguiente canción es "Mrs Vandebilt" y cuenta la leyenda, que cuando estaban en plena sesión de grabación se cortó la luz en todo Lagos. Por lo que tuvieron que empezar a improvisar con unos viejos generadores, que estaban dando casi sus últimos suspiros y que emitían fuertes sonidos que podían mandar al carajo todo el trabajo que llevaban hasta ese momento. Fue ahí donde la astucia de Emerick con la ubicación de los micrófonos dió sus buenos frutos, ya que al escuchar la grabación saltaron de alegría al escuchar que no se filtró ningún ruido externo. En cuanto a la letra, esta nos narra sobre la caída del imperio económico de la familia Vanderbilt (note que Paul le quitó la "r" para evitar líos legales. La historia de esta familia del siglo XIX ,de origen holandés pero radicada en Estados Unidos, tiene que ver con su empresa de barcos y ferrocarriles comandada por Cornelius "Comodoro" Vanderbilt, quien llegó a ser un exitoso y a la vez millonario empresario. Pero McCartney se detiene en la caída de ese imperio comercial, usándola como metáfora del triste final de The Beatles, que terminaron demandándose los unos a los otros con el fin de obtener ciertos dólares amarrados en algunos contratos. Quedaba claro que Paul no olvidaba aún ese asunto.
Y la Cara A del disco terminaba con un buen blues, acompañado de un riff cortante y un efecto en la voz muy similar al que usaba Lennon en sus piezas como solista. Hablamos de "Let Me Roll it", cuyo título fue tomado de una frase de la canción "I'd Have You Anytime" de su amigo y ex-compañero de banda George Harrison. Esto huele raro.
Pongamos atención, años antes John Lennon le dedicó a Paul la furiosa canción "How Do You Sleep?", donde además cuenta con la ayuda de Harrison en la guitarra slide. Y Paul, sin ningún miedo viene, usa un efecto de guitarra y de voz muy parecido al de las canciones de John y ademáss le saca el rollo a una canción de Harrison. Este Paul es un loquillo...
Denle las vueltas que quieran al asunto, pero mejor vamos al Lado B de este discazo.
Y este lado empieza con la única canción que tiene un aire a música africana, hablamos de "Mamunia". Cuenta la historia que en un paseo que dió Paul junto a Linda por Lagos, le llamó la atención un letrero que colgaba de una casa y que contenía esta palabra. Luego, se puso a investigar por aquí por allá, y supo que la traducción exacta a esa palabra de origen árabe era "Refugio Seguro". Paul quedó muy a gusto con este descubrimiento y empezó a improvisar melodías en su guitarra acústica. De paso desempolvó un viejo cuaderno donde había anotado unas frases sobre la lluvia, tras ver un diluvio universal (?) desde la ventana de un Hotel en Túnez en Enero de 1973 y "abracadabra" nació esta canción. Para el ex- Beatle, la lluvia significaba renacimiento y renovación del espíritu y era parte vital para que el ser humano se sienta conectado con la vida y el amor. En fin, una canción que solo podía ser firmada por puño y letra de McCartney.
Y llega el momento en que Paul le da un espaldarazo a su compañero Denny Laine y cantan a dúo "No Words", una simple ( y tonta?) canción de amor, que queda como un relleno para el disco debido a que no pega ni junta con sus antecesoras, y además se nota que fue hecha para que la gente no crea que el disco es solo Paul McCartney. La idea era mostrarse y venderse como banda. Que no se les olvide...
Para la siguiente canción es necesario que vayamos a Abril del año 1973, y tomemos un vuelo a Montego Bay, donde los McCartney decidieron ir de vacaciones. En esas tierras encontraron a un grupo de actores que se encontraban filmando parte de la película Papillon. Entre esos actores se encontraba el célebre Dustin Hoffman, quien tras una larga charla con Paul y Linda, decidió invitarlos a cenar en el hotel donde se estaba quedando.
En dicha cena, y en medio de anécdotas, risas y buenos manjares, Hoffman no paraba de llenar de elogios a Paul por su facilidad para crear tan buenas canciones. En eso el actor de "Kramer versus Kramer" pesca un diario que estaba sobre la mesa y le hace un reto a Macca: "A que no puedes escribir una canción basada en alguna noticia que aparezca en este periódico". Paul pilló el pasquín, y lo primero que le llamó la atención fue la noticia sobre la muerte del pintor y escultor español Pablo Picasso. Se puso a leer atentamente la noticia y encontró una de las frases que dijo el padre del Cubismo horas antes de morir: "Beban por mi, beban a mi salud, ustedes saben que yo no puedo beber más". La canción estuvo hecha de manera inmediata y Hoffman casi se cae de la silla, asustado si Paul era humano o un robot programado para hacer canciones.
Otro dato, es que esta canción no fue grabada en Lagos, para esta ocasión decidieron tomar la invitación del que fuera baterista de Cream, el señor Ginger Baker, quien se encontraba trabajando en los estudios de la compañía AIR, a las afueras de Lagos.
Para los que se deben estar preguntando que hacía Baker en esa zona, les informo que andaba investigando in situ todo lo que tenía que ver con percusión africana y la mezcla de estilos musicales que se podian encontrar en ese país.
Y llegamos a la ultima canción de este gran disco. Una llamativa frase piano nos avisa que llegó "Nineteen Hundred and Eighty Five", una pieza roquera, con alta energía, y que contiene en su letra algunas referencias a "1984" de George Orwell. No quedan dudas de que esta "rola" es lejor el mejor final para un disco que vale la pena tener en un lugar especial, porque es esencial y está entre los mejores de la historia del Rock/Pop.
Y de una vez por todas, no tengas mas dudas, Paul no estaba muerto...
Por ese entonces, a inicios del año 1973, Paul y sus Wings disfrutaban el éxito comercial del disco Red Rose Speedway. Además, ese mismo año compuso el tema principal para la cinta James Bond 007, "Live and let Die". Tanto la canción (con producción de George Martin) como la película, protagonizada por Roger Moore, fueron un éxito a nivel planetario, y esto nuevamente puso a Paul en la cima de los charts y obviamente con ganas de seguir superándose cada vez mas.
En ese entonces los Wings eran Denny Laine en bajo, Henry McCullough en guitarra, Denny Seiwell a la batería, Linda McCartney en coros y teclados y obviamente Paul, que iba de vocalista, pianista y guitarrista y además ponía su pequeña granja en Escocia para ensayar.
Fue en esos ensayos donde Macca le comunicó a sus músicos que era hora de innovar, de ir por nuevos sonidos y además armar las maletas, porque estaba algo aburrido de la rutina del Reino Unido. Como era de esperar esta decisión tomó por sorpresa a los integrantes, quienes también quedaron algo molestos. Pero Paul era el jefe.
Resulta que en ese periodo de buena cosecha musical para Paul, los demás integrantes empezaron a pedir aumentos en sus sueldos, porque la banda estaba generando ganancias con los singles, los conciertos y las invitaciones a programas de Televisión y en sus cuentas corrientes seguían recibiendo la misma cantidad de libras de cuando el proyecto aún estaba en pañales.
Mientras McCullough y Seiwell iban de oficina en oficina en el edificio de la EMI, buscando alguna forma de que les subieran sus sueldos, Paul ya tenía listo el destino para ir a grabar el siguiente álbum de la banda. El destino elegido era Nigeria, donde la EMI tenía un estudio de grabación y donde además pensaba que la pasarían de lujo entre ensayos y playa. Pero lo que McCartney no sabía era que Nigeria pasaba por una dictadura militar, donde la corrupción era un deporte olímpico y para mas remate pasaban por un brote de cólera. A todo eso súmenle, que cuando la familia McCartney tenía los pasajes listos para ir a los estudios de la EMI en Lagos, McCullough y Seiwell decidieron abandonar el proyecto ya que nunca contaron con el apoyo del ex-Beatle en el tema de sus salarios. Mas bien, Paul se hacía el tonto y tras conocer la decisión de sus colegas simplemente se encogió de hombros, respiro profundamente y le dijo a Laine que se encargue de las guitarras porque del bajo y la batería sería Paul el encargado. Asi que llamaron al ingeniero de grabación, Geoff Emerick, con quien ya había trabajado en los discos de los fab four y tomaron rumbo al pais africano.
En resumen, la estadía en Lagos fue una aventura muy particular para los McCartney y compañía. Primero, el estudio de grabación era precario en cuanto a implementos, y si se rascaban la espalda en la pared lo mas probable es que se fuera al suelo. Segundo, tuvieron que pasar mas de un susto, partiendo por extraños y ruidosos insectos que no los dejaban dormir, el asalto que sufrieron Paul y Linda en manos de un grupo de "malulos" que con cuchillo en mano le quitaron joyas, relojes y las cintas que contenían los demos de las canciones del disco, el infarto al miocardio que sufrió Macca a causa de que fumaba como si estuviera preso y la sorpresiva visita poco amigable de un grupo de músicos locales al estudio de grabación que iban con la misión de lincharlos y molerlos a palos por querer robar y a la vez lucrar con sus sonidos nativos. Finalmente Paul los puso en calma y les puso las cintas, para que comprobaran que no había ningún detalle de musica típica nigeriana en sus tracks.
Finalmente, un 7 de Diciembre de 1973, salía a la venta el LP "Band on the Run", que llegaría a la cima del Billboard y quedaría como uno de sus trabajos mas importantes en la carrera solista de este gran músico.
Así que acomodate bien, para las antenas, busca tu vinilo, tu cassette, tu CD o el Spotify y vamos por ese analisis canción por canción. Acompañeme!!!
El disco empieza con la canción que bautiza este LP, y usa ese viejo truco "collage" que usó Paul en el "Sgt. Peppers..." y en especial el "Abbey Road", que es juntar pedazos de canciones y armar un nuevo track como si fuera una torta de fresa (?). En "Band on the Run", Macca mezcla tres canciones, que vendrían siendo algo así como actos. En el primero, escuchamos una suave y dulce melodía con un Paul contándonos los humillado que se siente en esa celda, y el deseo de volver a ver a su gente y a su pueblo. Pero de la nada aparece una parte mas rockera, con un juego bajo-guitarra-batería digno del hard rock. Este sería el segundo acto, donde nos habla del plan de escape de esa cárcel. El tercer acto parte con una guitarra electroacústica con aroma a folk, y donde el cantante nos cuenta sobre su escape junto a su banda de malhechores. Esta canción llegó al primer puesto del Billboard, y debe sí o sí formar parte de cualquier playlist de música de los setentas.
Un intro de guitarras y saxofón nos anuncia que empieza "Jet", una típica obra McCarniana donde le da rienda suelta a su talento de crear canciones dignas del Pop. Inspirada en las travesuras de su perro, esta pieza llegó a entrar en el Top 10 del Billboard y además sirvió para que una banda australiana llevara Jet como nombre.
En la etapa final de The Beatles, Lennon acusaba que Paul componía "canciones para abuelas". Es que quizás John sentía uno que otro celo por la manera en que su compañero sacaba melodías al piano, y que al parecer se le hacía una tarea fácil y además llegaban a ser cara A de los singles de la banda y para mas remate, eran un éxito en las listas. Una de estas canciones que quizás le trajo a la mesa ese recuerdo a John, es "Bluebird". Una dulce y frágil balada acústica, cuya letra fue escrita en gran parte en el año 1970, cuando Paul y Linda estuvieron de vacaciones en Jamaica. En ella se usa el vuelo de un pájaro como metáfora del fuerte poder del amor, ese amor que traspasa el poder de la mente del ser humano y pide que ojalá contagiara a todo el mundo. Por si acaso, los juegos de voces en el coro son marca de la casa.
La siguiente canción es "Mrs Vandebilt" y cuenta la leyenda, que cuando estaban en plena sesión de grabación se cortó la luz en todo Lagos. Por lo que tuvieron que empezar a improvisar con unos viejos generadores, que estaban dando casi sus últimos suspiros y que emitían fuertes sonidos que podían mandar al carajo todo el trabajo que llevaban hasta ese momento. Fue ahí donde la astucia de Emerick con la ubicación de los micrófonos dió sus buenos frutos, ya que al escuchar la grabación saltaron de alegría al escuchar que no se filtró ningún ruido externo. En cuanto a la letra, esta nos narra sobre la caída del imperio económico de la familia Vanderbilt (note que Paul le quitó la "r" para evitar líos legales. La historia de esta familia del siglo XIX ,de origen holandés pero radicada en Estados Unidos, tiene que ver con su empresa de barcos y ferrocarriles comandada por Cornelius "Comodoro" Vanderbilt, quien llegó a ser un exitoso y a la vez millonario empresario. Pero McCartney se detiene en la caída de ese imperio comercial, usándola como metáfora del triste final de The Beatles, que terminaron demandándose los unos a los otros con el fin de obtener ciertos dólares amarrados en algunos contratos. Quedaba claro que Paul no olvidaba aún ese asunto.
Y la Cara A del disco terminaba con un buen blues, acompañado de un riff cortante y un efecto en la voz muy similar al que usaba Lennon en sus piezas como solista. Hablamos de "Let Me Roll it", cuyo título fue tomado de una frase de la canción "I'd Have You Anytime" de su amigo y ex-compañero de banda George Harrison. Esto huele raro.
Pongamos atención, años antes John Lennon le dedicó a Paul la furiosa canción "How Do You Sleep?", donde además cuenta con la ayuda de Harrison en la guitarra slide. Y Paul, sin ningún miedo viene, usa un efecto de guitarra y de voz muy parecido al de las canciones de John y ademáss le saca el rollo a una canción de Harrison. Este Paul es un loquillo...
Denle las vueltas que quieran al asunto, pero mejor vamos al Lado B de este discazo.
Y este lado empieza con la única canción que tiene un aire a música africana, hablamos de "Mamunia". Cuenta la historia que en un paseo que dió Paul junto a Linda por Lagos, le llamó la atención un letrero que colgaba de una casa y que contenía esta palabra. Luego, se puso a investigar por aquí por allá, y supo que la traducción exacta a esa palabra de origen árabe era "Refugio Seguro". Paul quedó muy a gusto con este descubrimiento y empezó a improvisar melodías en su guitarra acústica. De paso desempolvó un viejo cuaderno donde había anotado unas frases sobre la lluvia, tras ver un diluvio universal (?) desde la ventana de un Hotel en Túnez en Enero de 1973 y "abracadabra" nació esta canción. Para el ex- Beatle, la lluvia significaba renacimiento y renovación del espíritu y era parte vital para que el ser humano se sienta conectado con la vida y el amor. En fin, una canción que solo podía ser firmada por puño y letra de McCartney.
Y llega el momento en que Paul le da un espaldarazo a su compañero Denny Laine y cantan a dúo "No Words", una simple ( y tonta?) canción de amor, que queda como un relleno para el disco debido a que no pega ni junta con sus antecesoras, y además se nota que fue hecha para que la gente no crea que el disco es solo Paul McCartney. La idea era mostrarse y venderse como banda. Que no se les olvide...
Para la siguiente canción es necesario que vayamos a Abril del año 1973, y tomemos un vuelo a Montego Bay, donde los McCartney decidieron ir de vacaciones. En esas tierras encontraron a un grupo de actores que se encontraban filmando parte de la película Papillon. Entre esos actores se encontraba el célebre Dustin Hoffman, quien tras una larga charla con Paul y Linda, decidió invitarlos a cenar en el hotel donde se estaba quedando.
En dicha cena, y en medio de anécdotas, risas y buenos manjares, Hoffman no paraba de llenar de elogios a Paul por su facilidad para crear tan buenas canciones. En eso el actor de "Kramer versus Kramer" pesca un diario que estaba sobre la mesa y le hace un reto a Macca: "A que no puedes escribir una canción basada en alguna noticia que aparezca en este periódico". Paul pilló el pasquín, y lo primero que le llamó la atención fue la noticia sobre la muerte del pintor y escultor español Pablo Picasso. Se puso a leer atentamente la noticia y encontró una de las frases que dijo el padre del Cubismo horas antes de morir: "Beban por mi, beban a mi salud, ustedes saben que yo no puedo beber más". La canción estuvo hecha de manera inmediata y Hoffman casi se cae de la silla, asustado si Paul era humano o un robot programado para hacer canciones.
Otro dato, es que esta canción no fue grabada en Lagos, para esta ocasión decidieron tomar la invitación del que fuera baterista de Cream, el señor Ginger Baker, quien se encontraba trabajando en los estudios de la compañía AIR, a las afueras de Lagos.
Para los que se deben estar preguntando que hacía Baker en esa zona, les informo que andaba investigando in situ todo lo que tenía que ver con percusión africana y la mezcla de estilos musicales que se podian encontrar en ese país.
Y llegamos a la ultima canción de este gran disco. Una llamativa frase piano nos avisa que llegó "Nineteen Hundred and Eighty Five", una pieza roquera, con alta energía, y que contiene en su letra algunas referencias a "1984" de George Orwell. No quedan dudas de que esta "rola" es lejor el mejor final para un disco que vale la pena tener en un lugar especial, porque es esencial y está entre los mejores de la historia del Rock/Pop.
Y de una vez por todas, no tengas mas dudas, Paul no estaba muerto...
Comentarios
Publicar un comentario