RECKLESS / BRYAN ADAMS

El pasado 19 de Abril se cumplieron 35 años de aquella vez que el cantautor canadiense Bryan Adams igualaba el record impuesto un par de años antes por el disco Thriller de Michael Jackson, que era colocar seis canciones en el Top 15 del Billboard. Pero esto no era sopresa para nadie, ya que su disco "Reckless" fue un éxito en ventas y uno de los trabajos esenciales para entender el Pop/Rock de los ochentas.

Este fue un gran premio a la constancia que tuvo Adams en ese tiempo, ya que desde 1980 venía sacando discos, de ventas regulares con uno que otro single que llegaba a buenos puestos de las listas pero nada más. Aún le faltaba pulir algunos detalles.

Pero en Enero de 1983, sale su tercer disco, "Cuts Like a Knife", en donde decidió revitalizar su carrera, se puso a componer con su compañero de mil batallas, Jim Vallance, canciones mas rockeras, melódicas y con una producción extraordinaria de Bob Clearmountain. Este LP fue un éxito rotundo, y canciones como "Straight From The Heart" o "This Time" ya sonaban en las radios de todo el mundo. Bryan lograba el éxito que tanto buscaba, y de paso le entregó mas confianza en su carrera musical y eso lo llevó a comenzar un trabajo musical que lo dejaría ya como leyenda.

Es que el 5 de Noviembre de 1984 aparecería en las tiendas de discos "Reckless", su disco donde al parecer estuvo inspirado al 200 por ciento porque realmente marcó a toda una generación con un puñado de canciones que hasta el día de hoy siguen sonando en las radios de la nostalgia.

Este disco marcaba el regreso de Bryan  a los Little Mountain Sound Studios en Vancouver y en donde junto a Jim Vallance se pusieron un tatuaje en la mente que decía "haremos el mejor disco de nuestra historia, sea como sea y cueste lo que cueste". Y no se equivocaron.

"Reckless" lo llevó al sexto puesto del Billboard, lo llevó a sonar por toda Europa y Sudamérica, sus canciones eran éxito seguro y no podían faltar en ninguna tertulia de esos años. En su Canadá natal este disco estuvo 67 semanas en el Top Ten de ventas. El mundo conocía a Bryan y este conocía al mundo gracias sus canciones, esas que pertenecen a uno de los discos mas importantes de la década de los 80's y de la carrera de este cantautor que además es fotógrafo. Vamos ahora por ese canción a canción!!!

"One Night Love Affair: De entrada Bryan nos advierte que estamos ante un disco rockero, de esos para disfrutar en un pub tomando una buena cerveza. En esta canción Bryan captura todos los detalles musicales típicos del rock de los ochentas y lo adapta a la perfección. Con guitarras filosas y buenos riffs de Keith Scott y el buen pulso de Pat Steward en la batería, decoran de manera brillante la voz rasposa y festiva de Adams. En esta canción, que podemos tachar que es "simple pero eficaz", Bryan nos habla sobre dos amantes que quieren pasar una noche apasionada, pero apasionada de verdad.

"She's Only Happy When She's Dancing": Esta canción no merecía ir en segundo lugar, es que de inmediato se nota este bache en la carretera y eso puede perjudicial. Si bien es entretenida, digna para la parranda y con un buen riff  pero a pesar de eso no tiene nada más. Relleno puro y tan pronto Bryan!!!.

"Run To You":  Tras ese traspié aparece un hit de hits ochenteros. Un temazo mire por donde se le mire aunque trate sobre la infidelidad vista desde la perspectiva de un individuo que declara que seguirá corriendo donde su amada amante sin importar el daño que le hace a su esposa.

Pero la canción tiene una historia muy particular. Es que en 1983 el productor Bruce Fairbairn se contactó con Adams y Vallance para proponerle si podían crear una canción para el disco que estaba trabajando con banda neoyorkina Blue Öyster Cult. Los compositores aceptaron y de inmediato se pusieron a escuchar uno de los hits que esta banda publicó en 1976, la gran "(Don't Fear) The Reaper", y empezaron su análisis acorde por acorde para lograr una canción que capturara ese estilo.

En cuestión de días llegaron a componer una canción que titularon "Run To You", la grabaron con la base guitarra-bajo-batería y se la enviaron a Bruce. 

Pasó una semana y Fairbairn le comunicó a Bryan que la banda había rechazado la canción ya que la encontraban poco comercial. Finalmente los compositores dejaron la cinta de lado y seguirían trabajando en otras canciones. Pero cuando ya estaban en el proceso final de grabación de "Reckless", el productor Bob Clearmountain le informó al cantautor que aún quedaba espacio para una nueva canción. Adams no lo pensó dos veces y llevó al estudio una cinta con la versión demo que le había enviado un año atrás a los Blue Öyster Cult. Y tras hacerle uno que otro arreglo, Clearmountain logró sacarle todo el brillo necesario a una joya musical que sería un gran éxito en los charts y que hasta el día de hoy tiene muy orgullo a Bryan Adams ya que gracias a esta canción se hizo reconocido a nivel mundial. Mientras que el disco donde iba a ir a parar esta canción, el "The Revölution By Night" de los Blue Öyster Cult, fue un fracaso total en ventas.

"Heaven": En las fiestas de los ochentas también se bailaban estos lentos, que en el mercado musical se le denominaban como "power ballads". Y si esa balada pertenecía a una película cursi de amor, de seguro iba a ser un éxito y "Heaven" empezó en esa ruta. Es que esta hermosa balada fue publicada un año antes como parte de la banda sonora de la película "A Night In Heaven", que fue dirigida por John Avildsen, y que es un drama que trata sobre una profesora casada que empieza una aventura romántica con un estudiante, quien trabaja como stripper. La película fue un fracaso rotundo, era infumable y lo único que destacaba era esta balada donde Bryan cuenta con el apoyo del baterista Steve Smith de Journey. Esta sería una de sus tantas baladas exitosas que vendrían a futuro y que serían parte de una que otra película.

"Somebody": Y entramos a una canción apta para cantar a viva voz con amigos en un bar mientras alzamos las cervezas al cielo. La letra fue inspirada en una frase que siempre decía el abuelo de Adams que fue veterano de guerra peleando por  el ejército británico en la Segunda Guerra Mundial. El abuelo siempre le decía que "en la guerra todos son ganadores". Con esa frase en mente Adams (quien pasó por colegios militares) y Vallance (que era un fanático de las historias de guerras) escribieron esta canción dandole un giro en que el amor también es una guerra, donde siempre se tiene que lucha por el chico o chica que hace temblar tu corazón. En la letra los compositores también le dan un toque nostálgico al recordar sus inicios musicales, cuando con sus bandas escolares tocaban en las fiestas y el público en vez de disfrutar sus canciones simplemente los utilizaban de banda sonora para buscar parejas. En resumen, esta canción, que cierra el primer lado del disco, refleja la inocencia del amor de los adolescentes (de esa época).

 

"Summer of '69": Y empezamos el lado B con un tema que fue un éxito planetario. Una pieza rockera de tomo y lomo.

En el verano de 1969 Bryan tenía solo 9 años de edad por lo tanto la letra ya nos indica que es una historia ficticia que va mas allá. "Es una canción para recordar un verano cualquiera, lo de 69 no es por el año, es por la famosa posición sexual" diría el músico durante la gira promocional del disco provocando un revuelo de aquellos entre sus fanáticos. Es que en un principio la canción se titulaba como "Best Days Of My Life", pero finalmente terminó imitando el título de una famosa película del director estadounidense Robert Mulligan (la aclamada "Summer of '42") cambiando el 42 por el 69 para jugar con el doble sentido.

Si leen bien la letra notaran que hay algunas referencias a frases usadas en canciones de Foreigner, Bruce Springsteen y The Beatles que eran algunos d elos artistas favoritos de Adams y Vallance.

Otra de las frases famosas es "Jimmy Quit, Jody Got Married" y es que es una referencia a Jody Perpik, que era el sonidista de Bryan en los conciertos y parte de su staff. Es que en esos días en que Bryan grababa el disco, Jody aprovechó ese parón de giras y lo aprovechó para casarse con su chica. Es más, el matrimonio aparece en el videoclip, son los que van en un automóvil que lleva un letrero que dice "just married".

"Kids Wanna Rock": Y el rock para grandes estadios continúa con esta pieza que se sostiene bastante bien con respecto a la canción anterior. Con un coro apto para cantar a rabiar en un estadio, pub o en el carro rumbo al trabajo, este track contiene mucho ZZ Top en sus guitarras con uno que otro arreglo tex-mex en su cantidad necesaria. Pero insisto en que es una canción entretenida y llena de energía pero no llega a niveles de ser considerado un clásico.

"It's Only Love": Cuando estaba en plena grabación de este disco, Bryan supo que Tina Turner iría a dar unos conciertos a Vancouver. El músico, que se declaraba un fans a rabiar de de esta cantautora estadounidense (pero que ahora tomó la nacionalidad helvética), de inmediato agarró el teléfono y llamó a los representantes de la "Acid Queen" para proponerle si podían hacer un dueto.

Y así fue, porque tras dar uno de sus conciertos, Tina fue a los estudios de grabación y se junto con Bryan quien le presentaría esta canción que se convertiría en una de las mas destacadas del disco y de su carrera. Es que el encanto y la voz de Tina le dio ese impulso necesario para que esta canción lograra ser un éxito rotundo en las radios. "Trabajar y cantar con Tina fue increíble, Yo solía ir a sus shows y quedaba impactado con su calidad musical" mencionaría el rockero canadiense años después.

"Long Gone":  Un blues-rock que solo sirve para mostrar que Bryan también podía tocar la armónica. Relata una crónica anunciada de un divorcio que musicalmente no asombra mucho pero tiene tintes divertidos para pasar un buen rato. Al parecer Bryan quería imitar algo del estilo del cantautor y guitarrista estadounidense Tommy Conwell.

"Ain't Gonna Cry":  Y el disco finaliza con una canción con sabor a New Wave que se mezcla con guitarras pesadas, una buena línea de bajo y unos teclados que marcan bien los pasos. Lo que no se entiende es la parte final, donde la canción se descompone y queda algo floja. Sacando eso, tenemos una canción potente, entretenida y ochentera hasta la médula para darle el punto final al disco.

Y cuando ya disponemos a guardar este disco, nos queda mas que claro del por qué Bryan Adams llegó a ser catalogado en esos días como el "Rey del Rock comercial"  ya que sus canciones eran aptas para toda radio FM y hacían gozar a jóvenes, adultos y abuelos ya que no era un tipo polémico, tampoco era de sexo, drogas y ocultismo, sino que su estilo musical iba de la mano con su personalidad, de mostrarse como un buen tipo, un rockero de buena facha, educado y que siempre se mostraba de buen humor. Todo esto gracias al mítico "Reckless", el disco que marcaría un antes y un después en la carrera musical de este cantautor que ha vendido alrededor de 100 millones de álbumes en todo el mundo.